Sexualidad Mucho Más Que Sexo
- Universidad Saludable
- 5 jun 2019
- 4 Min. de lectura
Actualizado: 26 jun 2019
Muchas veces se cree que hablar de sexualidad es “hablar de relaciones sexuales” o hablar de “sexo”, sin embargo la sexualidad es mucho más que eso. Este artículo pretende abordar qué es la sexualidad y cómo reconocer una persona que goza de una sexualidad saludable.

Cuando se habla de sexualidad es necesario referirse a un aspecto central del ser humano que involucra el sexo, la identidad, los roles de género, la orientación sexual, el erotismo, el placer, la intimidad y la reproducción; el cuál se experimenta y se expresa en los pensamientos, fantasías, deseos, creencias, actitudes, valores, comportamientos, prácticas, roles y relaciones.
Es posible afirmar que la sexualidad es una de las múltiples facetas de la identidad personal, donde intervienen procesos biológicos, socioculturales y psicológicos.
Procesos Biológicos
Los procesos biológicos que intervienen en el desarrollo de la sexualidad tienen que ver con las características genéticas, hormonales, anatómicas y fisiológicas que distinguen a los hombres de las mujeres. El sexo no es algo que se hace, se siente o se piensa, "es lo que se es biológicamente" (Vargas, 2007).
En este sentido el ser humano es el único ser vivo capaz de pensar y cuestionarse acerca de sí mismo y decidir por lo que quiere ser y hacer en su vida. Es a través de este proceso continuo de reflexión como la persona logra organizar, cuestionar y transformar la noción que tiene acerca de sí misma y su sexualidad.
Procesos Psicológicos
Los procesos psicológicos hacen hincapié en el cuestionamiento personal, por tanto cuando una persona examina críticamente sus cogniciones (que incluyen en las creencias, las ideas, las opiniones, los conocimientos, las expectativas y las valoraciones que se van construyendo a lo largo de la vida sobre lo que significa ser hombre o mujer y todos los asuntos que se relacionan al dominio sexual), motivaciones ( las condiciones o los factores que mueven a las personas a actuar, las motivaciones permiten comprender por qué se elige actuar de cierta forma y no de otra) y las emociones ( que durante el proceso de formación de la sexualidad, informan sobre los aspectos del entorno, del comportamiento de las personas, de lo que se debe aceptar o cambiar para lograr lo que se quiere, y para sentirse satisfecho de lo que se es y se siente como persona).
Procesos Socioculturales
Los procesos socioculturales también influyen en la sexualidad desde que se nace. Al observar la condición biológica se atribuyen estereotipos sobre el deber ser y los comportamientos esperados como hombre o mujer.
A las características y comportamientos que socialmente se definen como propios de uno y otro sexo, al igual que a las normas que regulan las expresiones de la masculinidad y la feminidad y las relaciones entre los hombres y las mujeres, se las incluye en la categoría del género. A diferencia del sexo, el género es una construcción social, sus características son específicas de cada cultura, cambian con el tiempo al interactuar con los otros miembros de la sociedad.
¿ Cómo se puede reconocer a una persona que goza de una sexualidad saludable?
Conoce, acepta y valora su propio cuerpo.
Incluye la dimensión sexual en la descripción y valoración que hace de sí misma.
Se siente adecuada, competente y valiosa como persona, independientemente de ser hombre o mujer, femenina o masculina, heterosexual, homosexual o bisexual.
Controla su propia vida sexual.
Es capaz de resistirse a las presiones sociales para que piense y actúe de cierta forma en el dominio sexual.
Toma decisiones sexuales teniendo en cuenta sus propios criterios y evaluando las implicaciones de su comportamiento para sí misma, otras personas y la sociedad.
Discrimina entre los comportamientos sexuales que favorecen su bienestar físico, psicológico o social y aquellos que implican algún riesgo para sí misma o para otras personas.
Practica comportamientos de autocuidado, como acudir a exámenes médicos regulares, realizarse el autoexamen de los senos o de los testículos, toma medidas para evitar contraer y transmitir infecciones sexuales, incluido el VIH; usa métodos de planificación familiar, acude al control prenatal desde las primeras semanas de gestación.
Establece y mantiene relaciones significativas con otros, caracterizadas por la autenticidad, la reciprocidad y un sano balance entre la cercanía emocional y la autonomía.
Ejerce y defiende sus derechos sexuales.
Reconoce, promueve y respeta los derechos sexuales de las otras personas.
Está convencida de que su vida sexual pasada, presente y futura tiene sentido.
Tenga en cuenta que.
La sexualidad integra el reconocimiento y la valoración que hace la persona de:
Los aspectos biológicos que la caracterizan como mujer u hombre (identidad con el sexo) .
El grado de conformidad con los atributos y los comportamientos que la sociedad en la que vive establece como deseables y apropiados para su sexo (identidad con el género).
El sexo de las personas por las cuales experimenta interés y atracción física, emocional o sexual (identidad con la orientación sexual).
Por último el compromiso es no permitir que su sexualidad sea el resultado de imposiciones sociales sino el producto de un proceso consciente de toma de decisiones.
Referencias
Grupo de Investigación Familia y Sexualidad, Departamento de Psicología, Universidad de
los Andes.
Ryff, C. y Keyes, C. (1995). The structure of well being revisited. Journal of Personal and Social Psychology, 69, 719-727
Vargas-Trujillo, E. (2007). Sexualidad… mucho más que sexo. Bogotá D. C., Colombia: Ediciones Uniandes.
World Health Organization (2004). Definitions. Progress in Reproductive Health Research
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